Fallo de Implantación Embrionaria: ¿Qué es?
La implantación embrionaria es un evento crítico en la reproducción humana. Es un proceso delicado que implica una íntima asociación entre el embrión y el endometrio materno.
¿Qué ocurre durante la implantación?
El embrión busca el lugar más apropiado para posicionarse en el útero. Una vez que eclosiona y sale de su cubierta protectora (zona pelúcida), es capaz de adherirse firmemente al endometrio y comienza a invadir su tejido para continuar con su desarrollo. Irrumpe en el epitelio uterino con el fin de adentrarse y tomar contacto con el torrente sanguíneo materno.
Bajo la influencia de hormonas esteroideas (estrógenos y progesterona), ocurre una remodelación del tejido endometrial conocida como decidualización, que promueve la implantación del embrión, asegurándole el acceso al torrente sanguíneo y previniendo el rechazo embrionario por parte del sistema inmune materno.
Una implantación exitosa requiere un embrión competente, un endometrio receptivo y una comunicación precisa y sincronizada entre ambos.
¿Cuáles son las causas del fallo de implantación?
Aproximadamente dos tercios de las fallas de implantación son atribuidas a una inadecuada receptividad endometrial. Debido a que el estado fisiológico que permite la unión del embrión se presenta durante un período acotado de tiempo, conocido como ventana de implantación. Por este motivo, resulta imprescindible la coordinación entre el embrión y el endometrio.
Otros factores que también pueden afectar el éxito del proceso son:
- La inflamación en el sitio de implantación.
- La expresión específica de genes.
- Cambios en el microbioma vaginal y uterino.
- Factores anatómicos, hematológicos y endócrinos.
Falla de implantación recurrente: ¿Por qué sucede?
Cuando el proceso de implantación del embrión falla repetitivamente luego de tres transferencias de embriones de buena calidad, se conoce como falla de implantación recurrente.
Entre sus causas más frecuentes se encuentran:
- Tabaquismo.
- Obesidad.
- Gametas de mala calidad que impidan el desarrollo de un embrión competente.
- Trombofilia.
- Alteraciones uterinas (anomalías congénitas, pólipos endometriales, adhesiones intrauterinas).
- Patologías accesorias (ej. Hydrosalpinx).
La falla de implantación recurrente tiene una prevalencia del 15%, es muy frustrante para los pacientes y su tratamiento es uno de los desafíos más difíciles de la reproducción asistida