Hoy en día en una sociedad en donde la mujer se encuentra inmersa como profesional, trabajadora y sostén de familia, ha determinado muchas veces que se postergue el deseo de maternidad o simplemente ese deseo no surja. Sin embargo puede llegar un momento en la vida en el que te das cuenta que querés ser mama, a pesar de no tener pareja y aparecen miedos y angustia alrededor de esa idea. Enfrentas inquietudes como por ejemplo, si podrás hacerte cargo de ese niño sola.
Los modelos de familia hoy cambiaron mucho, cada vez son más comunes las familias ensambladas, monoparentales u homoparentales. Todas son igualmente válidas. Lo importante es que el niño nazca en un hogar con amor, donde fue concebido con deseo.
Hasta ahora todas tus preocupaciones eran tu carrera, tu trabajo, tu casa, tu realización personal y te preguntas y ahora ¿cómo hago a perseguir ese sueño?
En primer lugar lo que debés hacer es tomar contacto con el médico especialista en reproducción quien va a confeccionar tu historia clínica y solicitar todos los estudios de fertilidad, entre ellos aquellos que evalúan tu reserva ovárica o si tus trompas están permeables.
Una vez hecho esto, es él quien va a determinar, según los resultados, qué tipo de tratamiento es el más adecuado, según te ofrezca las mayores chances para quedar embarazada. Existes múltiples posibilidades, están los de baja o los de alta complejidad, con óvulos propios u óvulos donados, siempre en todos los casos utilizando una muestra de semen de banco.
La baja complejidad consiste en hacer una inseminación intrauterina en consultorio, para lo cual cuando viene el período la mujer comienza con pastillas por boca para estimular a los ovarios. Se realizan ecografías de control para determinar la respuesta de los ovarios a la medicación. Una vez que los folículos (aquellos quistes que contienen los óvulos) alcanzan cierto número y tamaño, se programa la inseminación, semejante en molestia a un PAP realizado de control, con la muestra previamente seleccionada del banco de semen.
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Si las trompas estuvieran tapadas, o la reserva se encontrara disminuida por una enfermedad como la Endometriosis, o una cirugía por un quiste, seguramente la opción más adecuada para lograrlo sea una fertilización in vitro.
Esto consiste en un proceso que utiliza medicación, en general inyectable, de autoaplicación, como por ejemplo la insulina que se aplican los pacientes diabéticos, para estimular los ovarios. Los controles suelen ser más estrictos requiriendo en promedio 3 o 4 ecografías, y así poder determinar el momento más exacto para extraer a los óvulos que se hace a través de una corta intervención en quirófano. Todo esto suele durar entre 12 y 14 días. Una vez extraídos los óvulos, se juntan con los espermatozoides de la muestra del banco para formar los embriones y luego transferirlos adentro del útero.
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¿La muestra de semen? ¿De quién es? ¿Cómo es el proceso?
Mientras se decide cuál es el tratamiento indicado según antecedentes, historia clínica y resultados de los estudios complementarios, la mujer tiene una entrevista con el banco. Un lugar en donde hombres se acercan a querer ayudar a otras personas a cumplir su deseo, pero para ello pasan por múltiples pruebas, que en caso de superarlas se encuentran en condiciones de poder donar su semen.
Se les hace un interrogatorio, un análisis completo general y de las enfermedades infecciosas, y un testeo genético. La muestra además debe cumplir con ciertos criterios que superan ampliamente a los impuestos como normales por la Organización Mundial de la Salud.
El proceso es anónimo, el donante no conoce la identidad de quienes reciben las muestras así como las receptoras tampoco de quién proviene. Sin embargo la selección se hace en función de las características físicas de quien va a recibir la muestra, así como su grupo y factor de sangre, entre otros.
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¿La obra social/prepaga me lo va a cubrir igual si estoy sola?
El deseo de procreación está contemplado en la ley de fertilidad médicamente asistida (Nro 26.862) que es de cumplimiento obligatorio e independiente de la constitución de la familia.